Techos de espectáculo

Marisa Alcore Marisa Alcore
Casa Orfila, Schneider Colao design Schneider Colao design Modern corridor, hallway & stairs
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No siempre mirar al techo significa estar ensimismado, hay techos que merecen ser admirados, aunque no estemos en el Vaticano. Edificios normales o pisos convencionales que esconden un secreto: un techo de espectáculo. No tienen frescos, ni tallas, ni tampoco una lámpara de araña con cientos de cristales, simplemente es su construcción la que hace que nuestras cabezas se reclinen, nuestros ojos quieran escaparse de sus órbitas y nuestras mandíbulas se disloquen. 

Antiguos o modernos, de hormigón, madera o cerámicos, pero con una característica en común: su técnica constructiva supera a cualquiera tipo de decoración. 

Sin embargo, no nos olvidamos de su principal función. Los techos son la parte interior de las cubiertas, cuya misión todos conocemos: proteger el interior de una vivienda, junto a los demás muros de la casa. Y aunque antes hayamos resaltado la estética de su construcción, no es esto lo más importante: las cubiertas han de estar correctamente aisladas de las temperaturas e impermeabilizadas contra el agua. Las técnicas constructivas han ido evolucionando con el tiempo: desde las cubiertas fabricadas con cañizo, hasta las estructuras más punteras. 

Hoy hemos reunido en este libro de ideas cinco ejemplos de arquitectura doméstica, cinco ejemplos de techos distintos que aún a pequeña escala no dejan a nadie indiferente. 

Con estructura de madera

Más empleados tradicionalmente o en la construcción de edificios de carácter rústico o rural, las cubiertas de madera son toda una exhibición de la técnica. Viguetas, vigas, cerchas o tableros, la madera puede construir cualquier elemento. Quizá con técnicas más evolucionadas, es más común hoy en día emplear otro tipo de materiales. Sin embargo, cuando se trata de la rehabilitación de un edificio, la recuperación de estas estructuras hacen que los espacios brillen más que nunca. Ellas brillan más que nunca. 

(Más sobre esta vivienda en este libro de ideas)

Forjados de hormigón de nervios in situ

Puede que el nombre no nos diga mucho. Puede sonarnos demasiado técnico o incluso demasiado normal, ¿no todos los forjados son de hormigón? No todos, pero sí la gran mayoría. Y a pesar de su posible normalidad, ¿quién está acostumbrado a verlos de esta manera? Quizá no sea su material o su forma, o quizá lo sea todo. El forjado parece visto y este el punto clave: no estamos acostumbrados a verlos, normalmente falsos techos nos los ocultan. De geometría agresiva, de aspecto másico, con un ritmo muy marcado y mostrándose sincero, este forjado aporta calidad a un espacio, que sin él no sería lo mismo. 

Revoltones y vigas de madera

Más propio de edificios antiguos y viviendas tradicionales, el techo con revoltones se construía antes de la llegada de las bovedillas que hoy conocemos. Estos forjados unidireccionales cuentan con dos tipos de elementos. Los elementos lineales, las viguetas, entre las cuales se sitúan los elementos abovedados, revoltones. Tradicionalmente se realizaban in situ con cerámica, aunque hoy en día suelen emplearse elementos prefabricados. En esta imagen, las pequeñas bóvedas se han pintado de blanco, como el resto del espacio, y se han querido resaltar los elementos de madera pintándolos de rojo. Una técnica tradicional con aspecto moderno. 

Un falso techo de madera

En esta tercera imagen no se muestra ningún forjado. Lo que podemos ver en la parte de arriba de la fotografía no es otra cosa que un falso techo. Pero no un falso techo convencional, sino un falso techo abierto de madera. Empleados para ocultar las instalaciones que pasan por debajo del forjado, como las de electricidad, iluminación, ventilación o agua, los falsos techos pueden escogerse con gusto o no. Pueden hacer que un espacio se lea distinto o incluso crear un ritmo, como en este caso. Colocadas en diagonal, las lamas de madera rompen la heterogeneidad de un espacio de líneas rectas y colores claros. Crean un contraste con los materiales fríos y se convierten en el espectáculo de este pasillo convertido en ducha. 

Forjado de hormigón

También de hormigón, pero en este caso, de manera diferente. Mientras que en el segundo ejemplo os mostrábamos un forjado unidireccional de nervios in situ de hormigón, en este caso se ha empleado el mismo material, pero de una manera diferente. Encofrado en madera como si de un muro se tratara, la geometría irregular de este forjado crea la sensación de encontrarse en una cueva de piedra: en algún lugar tallado por la propia madre naturaleza. 

En el lado opuesto de casa: los pavimentos. En este libro de ideas encontrarás ideas sobre qué suelo elegir para tu vivienda. 

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