6 consejos para ahorrar en calefacción

José Manuel Peñalver Romero José Manuel Peñalver Romero
Reforma de loft en Madrid, Arquitectos Madrid 2.0 Arquitectos Madrid 2.0 Industrial style study/office
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Poco a poco se acerca el invierno, la temperatura exterior disminuye y dentro de casa se empieza a sentir el frío. Es el momento de hacer funcionar la calefacción. Pero no hay que abusar, que fuera haga frío no significa que dentro tengamos que elevar en exceso la temperatura; lo ideal sería mantener una temperatura constante en torno a 20º y 21º. Aumentar la temperatura por encima de esas cifras para estar en camiseta, además de un riesgo para la salud es un gasto de energía innecesario. En homify queremos ayudarte a hacer un consumo energético responsable y sostenible para la factura por calefacción no se te dispare este invierno. En este libro de ideas te ofrecemos unos consejos para que utilices mejor la calefacción y le saques mayor partido. 

Ajustar la temperatura media

Como acabamos de indicar uno de los factores que más eleva el gasto en calefacción es el exceso de temperatura. No es necesario subir el termostato más allá de 21º para lograr un ambiente confortable y agradable. Andar en pantalón corto y manga corta en invierno es desafíar al clima y a la salud de forma innecesaria. Enciende la calefacción cuando estés en casa y apágala cuando salgas. Si alguna habitación no la usas, puede cerrar total o parcialmente el radiador, y por las noches, cuando estás al cálido abrigo de la cama, puedes reducir la temperatura media. Se trata de ajustarse a las condiciones ambientales y hacer un uso racional de la calefacción.

Aislamiento térmico adecuado

Asegúrate de que puertas y ventanas cuentan con un aislamiento térmico eficiente. A veces es conveniente invertir en una pequeña reforma para cambiar el acristalamiento de las ventanas, porque a la larga termina por amortizarse con el gasto que nos ahorramos en calefacción. Procura también aislar el espacio por debajo de la puerta de la calle para evitar la entrada de corrientes de aire exterior que enfríen el ambiente. Y en general mantén las puertas cerradas, para que no se escape el gato.

El mantenimiento

Si vamos a instalar un sistema de calefacción por radiadores debemos realizar un análisis previo de la colocación más adecuada para el tipo de estancia que se trate. No en vano, alrededor de la mitad del gasto energético de una vivienda se destina a la calefacción. Debemos poner atención a la altura de los techos, a la dimensión de los espacios y la ubicación de las ventanas. Así mismo, de un año para otro, conviene purgar los radiadores para evitar bolsas de aire que disminuyan el poder calorífico con el consiguiente gasto energético.

Equilibrar los flujos de temperatura

Otra cuestión importante es separar ambientes que puedan tener diferentes temperaturas, pues evitaremos que el calor acumulado en una estancia se transfiera a otra más fría que no estamos utilizando. Debemos ser especialmente cuidadosos con las comunicaciones en altura, puesto que muchas veces se producen pérdidas de temperatura a través de la escalera, si las distintas plantas que éstas unen no tienen la misma temperatura y no están independizadas entre sí. También las divisiones entre espacios calefactados y espacios que no lo están deben garantizar que no se produzca un flujo de energía calorífica entre ellos.

Aprovechar el calor del horno

La cocina probablemente sea el sitio más cálido de la casa en invierno. el calor de los fogones y del horno hace que la temperatura sea considerablemente mayor. En esta estancia podemos ahorrarnos la calefacción mientras se cocinan nuestros platos y aprovechar la temperatura del horno cuando está a pleno rendimiento con el asado para caldear durante unas horas la vivienda. Todo son recursos que se pueden aprovechar para hacer un consumo más racional y eficiente.

Las cortinas y textiles como aislantes

Uno de los complementos que nos pueden ayudar a conservar mejor el calor dentro del hogar son las cortinas. Si nuestro salón poseen grandes ventanales, en las horas en las que no podemos aprovechar la luz solar, lo mejor es correr las cortinas y aislar el interior del salón del frío de los cristales. También en los dormitorios, usando una ropa de cama adecuada que proporcione el calor suficiente evitamos dormir con la calefacción encendida. 

Si quieres averiguar otros secretos para mantener la casa caliente en invierno sin caer en excesivos gastos, visita 6 sugerencias para una calefacción eficiente..

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